Pantano cercano a Nashkell, en el interior de las ruinas del templo ?lfico, mas all? del filo de la medianoche.
Akaradrim,paladin de Moradin El crepitar del fuego sobre las ramas de la barrera de Pah y el acre olor que desprendian al quemarse,hizo que los recuerdos de Akaradrim aflorasen dentro de su mente.
Recordaba un olor similar en una caverna de su tierra natal,justo despues de que la partida de guerra llegara hasta el peque?o poblado.Los orcos,multiplicandose como ratas,habian iniciado una nueva campa?a con su estilo habitual: matar a todo lo que se moviera.Los enanos habian contratacado y su superior destreza y habilidad militar les habia dado una serie de victorias,pero no la definitiva puesto que el numero de los pieles verdes no disminuia.
Su grupo se habia separado de la compa?ia principal para explorar una zona de tuneles de donde provenia el extra?o y fuerte olor.Su jefe,el viejo Rajapiedra,era un enano astuto y experimentado que no permitiria que los orcos conquistaran un solo palmo de terreno mas,por lo que esa peque?a expedicion averiguaria si habia algun tipo de puesto avanzado.
Recordaba la frialdad del tunel mientras descendian y los extra?os y retorcidos mohos que adornaban sus paredes,desplegando un abanico de frios colores en la profundidad de la tierra.Pero lo mas relevante era el olor.Fuerte y penetrante,aumentaba su intesidad conforme se acercaban,y en el flujo y reflujo de los aromas,un nuevo toque,sutil y esquivo,se entremezclaba con la sinfonia original.Ni ?l,ni ninguno de sus jovenes compa?eros pudo identificarlo, pero el viejo Rajapiedra olfateo y lanzo un suspiro como si en su interin supiera perfectamente lo que les aguardaba al final.
El horror.Simplemente,eso era lo que esperaba agazapado detras del ultimo recodo.El horror de encontrar un peque?o poblado de gnomos de las profundidades salvajemente asesinados y quemados por la vanguardia orca.Hembras,varones y peque?os,todos muertos,desmembrados y quemados para deleite y disfrute de los canibales de piel verde.
Siempre recordaria el olor,siempre.
Pah Quall dijo:Un momento
La voz del druida le saco de su ensimismamiento,y con curiosidad contemplo como este se acercaba al muro donde parecia que habia visto o encontrado algo.
El paladin aguzo su vista en un intento de descubrir lo que el druida habia visto,pero fue en vano puesto que no distinguio nada hasta que...
?Un raton?-penso cuando al cabo de un momento distinguio una peque?a forma sobresalir de la pared y llevar algo adherido.
Pah Quall dijo:Akaradrim, Earhum, a?padme a esa repisa, creo que son nuestros amigos...
Eso espero,porque si cuento que un raton me ha salvado de vagar por unas ruinas siniestras,las risas se oiran de punta a punta de Faerun-dijo el enano mientras ayudaba al druida a elevarse.
Pronto saldrian de alli,encontrarian al que estaba haciendo todo ese mal y quizas,solo quizas,podrian librarse del olor