15 de Marzo de 2042
9:43 AM
Zona de combate
En la casa de Gustavo
Gus maldijo mentalmente: ?C?mo M?ximo hab?a atra?do tan est?pidamente a semejantes tipos hasta all?, comprometi?ndolo? Ahora tendr?a que abandonar precipitadamente esa vivienda dejando atr?s varias cosas que le resultaban muy preciadas, algunos de sus inventos m?s ingeniosos entre otras. Pero no hab?a tiempo para lamentarse, deb?an actuar presurosamente y Gus ya estaba preparado para eso, hab?a llegado el momento de corroborar la eficacia de sus previsiones.
- Esper? un segundo, que no van a poder entrar tan f?cilmente. Tengo que hacer algo antes de que rajemos por la salida de emergencia ?que fabriqu??.- Resalt? esas ?ltimas palabras a prop?sito, para que M?ximo no se desesperara busc?ndola ni temiendo que los atrapen o cortaran la huida.
Mientras hablaba, Gustavo se dirigi? a su mini taller y, despu?s de accionar unos botones que abr?an un panel oculto, guard? all? a algunos de sus ?inventos? m?s preciados que no pod?a cargar as?, apresuradamente. Cerr? el panel oculto y, saliendo del mini taller, nuevamente accion? otro mecanismo que ocultaba con una falsa pared al taller del que, adem?s, hab?a recogido la ?mochila de emergencias? como acostumbraba denominarla.
Ante la at?nita mirada de M?ximo, que evidenciaba no comprender qu? demoraba ahora a Gustavo, oyendo c?mo golpeaban a la puerta de calle, ?ste ?ltimo sembr? algunas cosas por el suelo y accion? algunos dispositivos escondidos, explic?ndole a su amigo:
- Cuando logren entrar, ya que me incluyeron en su lista, que sea con causa, llev?ndose algunas sorpresitas. And? yendo para la cocina, que por ah? est? la salida.-Segundos m?s tarde, abri? una de las alacenas para accionar una traba oculta que produjo un chasquido en el bajo mesada donde estaba la bacha para lavar los platos. Abri? las puertas del bajo mesada. Se arrodill? asomando debajo y, tras forcejear un poco, sali? de all? e indic? a su amigo:
- ?Ten?as apuro? Pas? primero al edificio de al lado, la pared est? abierta.-
Ni bien pasaron a trav?s del hueco en la pared, arrastr?ndose por debajo del fregadero, asomaron a un garage de la casa vecina.
Mientras Gus volv?a a cerrar el hueco de la pared con una gran traba, explic? a M?ximo:
- Siempre trato de prevenir casos como ?ste. En ?se placard del fondo, hay algunas cositas que nos pueden llegar a salvar la vida. Entre otras, algunas prendas para disimular nuestra apariencia y un par de armas con algo de munici?n. And? eligiendo r?pido, que no s? si vamos a poder salir de ac? sin que nos noten, que es lo que preferir?a, antes que andar a los tiros en medio de la calle a esta hora.-
Al ver que M?ximo miraba el contenido m?s que decidirse, Gus le pregunt?:
- ?Qu? te parecen los vestidos de monjas?- Sacando a uno y ofreci?ndolo- Es una vieja estrategia, pero todav?a da resultados y son t?nicas f?ciles de poner o sacar dej?ndonos puesta debajo la ropa actual.- Inmediatamente agreg?, haciendo que asomara otro de los que estaban colgados- De odalisca, no creo que te quede.-
Como parec?a que nada satisfac?a a M?ximo, finaliz?:
- Te doy otra opci?n: Nos vestimos de t?pico matrimonio musulm?n. Y si quer?s, yo hago de mujer, as? no se me ven m?s que los ojos. Vos, con t?nica y turbante, tipo jeque, vas a quedar menos femenino si tanto te molesta.-