Aqui pongo mi historia. Tal como ha hecho Jurgen, la dejo un tanto abierta para que aquellos que quieran introducirse usando nuestras historias como base puedan hacerlo.
Mi personaje se llama Bohr, es humano rashemí y es un soldado de fortuna, aunque aquellos que deseen contratarle deben de cumplir dos requisitos :
- No aceptara bajo ningun concepto un encargo que le obligue a asesinar a otra persona.
- El combate es un medio para conseguir un fin, si el fin no es digno, no habrá combate. No importa la recompensa si el fin no es justo.
Es de piel morena, pelo oscuro, barba cerrada y espesa, sobre 1.80, rondara los 75 u 80 kilos, de complexion robusta. Conoció a Ocelote en las Cortes Elficas (?) donde su Espadón fue una valiosa ayuda para expulsar a los drows. Aunque bueno, esto siempre, claro esta, con el permiso de Jurgen.
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[Trasfondo]
La vida era dura en las tierras de Narfell, pero, pese al frio cortante de la noche y las lloviznas que solían regar con abundancia las estepas, ver las primeras luces del alba reflejarse sobre la delicada escarcha en la ramas de los arboles hacian que todo valiese la pena.
- Otro dia mas en las fronteras, ¿eh Bohr?, no nos dejan descansar los barbaros ultimamente - Ambos hombres sonrieron mientras levantaban el campamento.
Bhor era joven, apenas habia vuelto de su rito de madurez hacia un par de años, pero rapidamente se habia ganado un puesto en los cuerpos que patrullaban las fronteras. Un viejo oficial se habia fijado en él durante los primeros meses de servicio militar tras su vuelta y desde ese momento habia entrado a servir bajo su mando obteniendo pronto distinciones en el campo de batalla, quizas pronto podría ascender a oficial y volver a la capital donde su prometida le esparaba.
Francamente, al viejo las cosas no le podian ir mejor, corrian rumores de que el actual fyrra estaba poniendo a prueba a los oficiales para ver quien seria su sucesor.... y parece ser que Volgar, el viejo, esta en esa lista.
- ¿Cuales son las ordenes para hoy, mi señor? -
- Hoy tengo buenas noticias para vosotros, podreis holgazanear durante todo el dia, no avanzaremos hasta la noche - Volgar buscó bajo su capa un pequeño fardo, y tras abrirlo dejo entrever una pequeña carta - con un poco de suerte hoy se habra acabado todo. - El viejo hizo una pequeña pausa, y parecio meditar las siguientes palabras que saldrian de su boca - Cuando termines de levantar la tienda, reune a los hombres y diles que esten listos al atardecer. Intenta acostumbrarte a dar ordenes, ¿quien sabe....? - Y con un guiño de complicidad se despidieron.
[El anochecer]
- ¡Caballeros! Hoy es el dia en que conseguiremos expulsar a los barbaros de Nar de este maldito monte. A mis oídos ha llegado la información de que estos malditos perros bastardos han pedido ayuda al mismisimo dios Helmo y le rinden culto, asi como antes le rendian culto a los señores de la oscuridad.
He solicitado refuerzos. Nuestra misión será acabar con sus sacerdotes para diezmar su moral, asi nuestros refuerzos podran acabar con el grueso de sus tropas aprovechando las circunstancias.
!Alzad vuestras armas! !por la victoria!-
Las tropas comenzarón a avanzar amparandose en la noche, con una plegaria silenciosa en los labios y y la esperanza de llevar a cabo la misión.
[La misión]
Tras las primeras escaramuzas, los barbaros se volvieron demasiado numerosos para poder contenerlos, muchos rashemitas murieron intentando cruzar el cerco de las tropas barbaras para penetrar en el campamento y buscar a los sacerdotes....
... Solo algunos lo consiguieron
Volgar y Bohr se abrieron paso, lucharon espalda contra espalda y ganarón cada centimetro regandolo con sangre rashemita y barbara. Cuando llegarón al templo, el viejo pagó para cruzar sus puertas uno de sus ojos y el mas joven jadeaba por el cansancio.
- ¡Bohr! ¡Tomate unos segundos para recuperar el resuello y entra en el templo! Traeme la cabeza del sacerdote ¡Y por tus muertos , no se te ocurra fallarme! Si no fallamos hoy, cuando lleguemos a central puede que yo sea el nuevo fyrra y tu seas el nuevo oficial. -
Tras captar la buena noticia, el joven Rashemi pronto se adentro en las profundidades del edificio intentando recuperar el aliento. Su oficial habia notado que si hubiera tenido que dejarle para guardar la puerta, le habrian fallado las fuerzas.
Pronto encontro la sala que buscaba, una doncella intento cortarle el paso, pero Bohr embistió con fuerza arrojandola al suelo y desarmandola.
- ¿Donde esta el sacerdote de Helmo? ¡Contesta!- Se produjo un silencio incomodo que se vio interrumpido por un lejano sollozo, como de un niño. -¿Pero que demonios....?- Al fondo de la sala yacía un infante acurrucado, que temblaba de miedo, vestido con las ropas de un sacerdote.
- ¡Nos llamais barbaros y sois vosotros los que asaltais nuestras aldeas de noche! ¡Y ahora venis en busca de un niño para asesinarlo! -
- ¡Calla mujer! - El soldado abofeteó la cara de la doncella y la levanto asiendola fuertemente de un brazo - ¡No me tientes mujer! ¡¿Donde esta el sacerdote?¡ -
- ¿Es... es esta la gloria del imperio rashemita? - Dijo entre sollozos la mujer - ¡Por los dioses, si es solo un niño!. -
- Bohr, acaba con ella, yo matare al niño - Volgar habia entrado en la sala mientras se producía la escena, estaba empapado en sangre enemiga - ¡A que demonios esperas soldado!, ¡ Es una maldita ORDEN!, nuestros refuerzos han llegado, si hacemos bien las cosas esto acabara ¡aqui y ahora! -
- Pero.... ¡pero si es un niño! ni tan siquiera podria mantener una espada si le dieramos una, ¿que honor nos quedara si....?[color] -
Limpiando la espada en un trozo de tela, Volgar abanzó - Aparta entonces, yo lo hare . - Y levantó la espada para descargarla sobre sobre el indefenso crio. - ¡No! - La espada de Bohr se interpuso en el ultimo momento.
- Aparta de mi camino chico, nadie va a impedir que consiga llevar a cabo con mi mision ¡ y tu menos que nadie! -
Justo en ese momento irrumpieron en la sala varios barbaros.
[Central]
- ¿Que te ocurre Bohr?, desde que volviste de la frontera te noto extraño, distante, es como... como si a tu alrededor siempre hiciera frio. Me preocupas. -
Alina era una joven vivaz, de pensamiento rapido, morena y con cuerpo capaz de despertar la envidia entre los soldados cuando paseaba con Bohr. Había pocas cosas que le escapasen a su entendimiento, y todo lo que le ocurriera al muchacho lo notaba de forma inmediata.
- Es solo.... estoy cansado, ya sabes, hemos vuelto de la frontera hace solo unos dias y... necesito descansar, eso es todo.-
- ¿Por que no vienes a casa de padre? siempre te gusto rondar por alli cuando eramos un crio, pasabamos los dias junto a la fuente del patio, ¿recuerdas aquellas tardes?...
- No, lo siento Alina, necesito estar solo.. El soldado interrumpió a la joven casi sin darse cuenta.
- Como quieras, no insistire, descansa - Ella le beso la mejilla, el parecía distante.... suspiró, se despidieron. En un futuro, Bohr lamentaria no haber pasado mas tiempo con ella.
[Nuevo destino]
Solo habían pasado unos dias, las incursiones barbaras se habian recrudecido. No solo no consiguieron eliminar a los sacerdotes, si no que ademas habian tenido que huir de la batalla los Rashemitas a pesar de haber llevado una ingente cantidad de tropas para reforzar las patrullas de la frontera.
Bohr habia sido llamado a servicio hacia tan solo unas horas, apenas había tenido tiempo de hacer el equipaje cuando recibio la visita de Volgar.
- Te "ves" bien Bohr - El viejo tuerto sonrio con sorna - Ten, lleva esta carta la padre de esa chica que se hace pasar por tu novia. Intenta acostumbrarte recibir MIS ordenes, por que.... ¿nunca se sabe...? ¿no? -
- ¿Que significa esto, Volgar?-
- Alguien ha decidido que el padre de tu querido amor sea llamado de nuevo a filas, a las fronteras de Narfell, asi que toda su familia tendra que mudarse y acostumbrarse al frio clima de las montañas -
- ¿Esta es la forma en que te vengas de mi? Eres un maldito...
- Ah.... no, la forma en la que me tomo mi venganza es mandarte a la frontera opuesta. Que tengas buena suerte, mi joven amigo.
[Venganza]
Llovía cuando Alina tuvo que partir, los jovenes cruzaron su mirada y se dijeron sin palabras todo lo que sentian el uno por el otro. Se abrazaron y sintieron como el mundo alrededor de ellos se derrumbaba cuando tuvieron que separarse para tomar caminos opuestos.
Los dias pasaron lentamente enlas fronteras con Thay, hasta que un amanecer llegaron noticias de una rebelion en las laderas de Narfell. Cuando llegaron los regimientos donde se encontraba bohr, todas las fuerzas habian sido aniquiladas. El joven enloqueció de dolor cuando supo quien el responsable de la rebelión era tuerto, enjuto, y luchaba con una ferocidad y destreza sin par.
Bohr derramó lagrimas al dar sepultura al cuerpo del padre de Alina, y lloro aun mas al no encontrar el cuerpo de su amada.
Una noche, finalmente, el traidor dio la cara, asaltó los fuertes fronterizos en un ataque conjunto con las hordas barbaras, y capturo a todo sus mandos... y entre ellos a Bohr.
[desenlace]
Las horas de cautiverio fueron cortas comparadas con las de tortura, y cuando al fin terminaron de torturarle comenzo el verdadero calvario.
Le obligaron a postrarse ante Volgar encadenado de manos y pies mientras le vejaban y se reian de el.
- Vaya, veo que sigues vivo Bohr. -
- ....siento disgustarte... al negarte el placer... de lo contrario -
- ¡Ah! ¿Disgustarme? ¡me sorprende! siempre fuiste un hombre bastante duro, lastima que tu lealtad que no fuera tan inquebrantable como tu cuerpo -
- ¡Lealtad! - Bohr rugío reuniendo las ultimas fuerzas que le quedaban - Te seguí durante todas y cada unas de las batallas. ¡Nombra una guerra que haya tenido lugar en Rashemen y alli habre derramado sangre contigo matando hombres! ¡Guerreros! -
- Hombres y guerreros. Yo solo te pedía que mataras a un niño.- El tuerto ando en circulos alrededor del maltrecho soldado - Solo tenias que cumplir esa simple orden y yo estaria en un pequeño salon firmando ordenes y llevando una vida tranquila donde no me faltaria de nada...
... y tu, ¡Tu! ¡te habria recomendado para oficial! habrias obtenido grandes logros, ¡La gloria! -
- ¡NO!
- ¿Acaso no era a lo que aspirabas? A obtener reconocimiento, ¡la gloria!, despues casarte.... -
-Si la gloria de la que hablas implica no tener Honor, no la quiero, prefiero morir -
Volgar le agarró de la nuca, y levanto la cabeza de Bohr para que viera que traian encadenadas a dos mujeres. Una mueca de dolor se dibujo en el rostro del joven Rashemita cuando reconocío a Alina, la otra mujer sin embargo le resultaba familiar, pero no conseguía recordar donde la habia visto.
- ¿Las ves? - Susurro Volgar a su oido - Me llevó un tiempo encontrar a esta sacerdotisa en cuestion. Aunque aun no se si lo que te convencio para no matar al mocoso fueron su par de tetas o es que en ese momento tuviste una revelacion y tomaste su Fe.
¡Oh!, ¿Pero y que me dices de la otra? la he probado y tengo que reconocer que tienes buen gusto... tan joven, tan tierna..... -
- Bastardo..... -
Volgar le pateó las costillas arrojandole al suelo.
- Tienes una oportunidad - uno de los soldados desertores que le había traido a rastras arrojó una espada a los pies de bohr - Es sencillo, tomas esa espada, matas a una de ellas y la otra sera libre, para vivir una vida de cobardía contigo. En realidad tambien capture al niño, pero no pude evitar destriparle delante de esa zorra .
- Helmo te arranque la lengua -
El tuerto sonrió al oir las palabras de la doncella barbara. Alina sollozaba sin poder hablar, implorando con la mirada a Bohr que la liberara de aquel suplicio.
- Tu eliges, ¡Desencadenadle! -
Bohr se puso en pié, miro a ambas mujeres a los ojos. En ellos vio reflejada una verdad horrible : no importaba a quien matase, ambas querian vivir.
Recordo fugazmente la mirada de todos los hombres que habia matado, elfos, drows, enanos... miradas de padres, hermanos, hijos.... Cuando el brillo de la mirada se volvía opaco y dejaban ser... de estar vivos...
-Y....- Hace una pausa para tomar Aire, esta cansado, le cuesta mantenerse en pie y se le nubla la vista - ....¿Y si no mueren ellas?
- ¿!QUE¡? -
- ¿Si... si muero yo... las dejaras libres?-
- ¡¿POR QUE?! ¡Por que demonios no eres capaz de arrancarle la cabeza a una de ellas! ¿!Acaso no te ofrezco la oportunidad de vivir con la persona que quieres!? ¡De salvarte! Y tu elijes ¿que? ¡por que! ¿¡POR QUE!? -
La espada cae de los dedos de Bohr, ya no tiene fuerzas para sostenerla.
- Por que.... cada vez que matamos a una persona... perdemos.... cada vez que combatimos, perdemos..... yo.... -
- ¡NO! ¡Eso no es verdad! ¡Mira todo lo que he ganado!, ¡riquezas! ¡Poder!. ¡Cuando luchabamos para Rashemen nadie podía amenazar nuestras tierras! -
Bohr cae de rodillas, y dirigiendole una ultima mirada a su antiguo superior, con su ultimo suspiro exhala unas palabras en voz baja, que enmudecen a Volgar - Mira... todo.. lo que has perdido.....
[Epilogo]
Bohr despertó en un poblado Barbaro, sus heridas habian sido atendidas y cuidadas. Pocos dias despues ya estaba restablecido y podia caminar.
Tanto Alina como la doncella habian sido tambien liberadas, quizas Volgar habia dado reencontrado su piedad o su misericordia en lo mas profundo de su alma, ¿quien sabe?
Al alba decidió marcharse, decidió apartarse de Alina y dejar que ella siguiera su vida y la rehiciese si queria. Él sin embargo desde el mismo momento en que planto cara a Volgar quizas estaba sentenciado ¿Le habia dejado el Viejo oficial libre para darse el placer de darle caza mas tarde?¿por que no le habia matado? Tambien sentía en su interior un vacio extraño que encontraba imposible de explicar, necesitaba respuestas.
La doncella le sorprendio en medio de sus preparativos, traía consigo una espada. - Anoche tuve un sueño, y supe que hoy ibas a partir - Bohr sonrío, termino de empaquetar los pocos enseres que le habian facilitado y se dispuso a marcharse - Guerrero, ¿que perdisteis al combatir? -
Bohr se detuvo un instanteen la puerta de la choza, titubeó, despues girandose no pudo evitar reir en voz baja - En aquel momento lo supe, pero ahora ya no, es como si se me hubiera borrado de la cabeza... tal vez sea nuestra humanidad, o la oportunidad de conocer a los que mueren para saber si de verdad lo merecían.
No lo sé. - Suspiró, durante un momento miró sus manos. - Matar a hombres no trae la honra, ni la gloria. No se cual es el sentido de todo esto, de la vida, de las razas... Buscare lo que perdí, y despues.... despues no se lo que haré -
Tendiendole la espada, la mujer sonrio - Hagas lo que hagas, Se digno. - Y cuando Bohr tomo el arma entre sus manos, musitó a modo de despedida - Que Helmo te Guíe y proteja -